El contacto con dos o más perros o gatos durante el primer año de vida se asocia con una reducción de las respuestas alérgicas en los años posteriores de la vida del niño. El número de pacientes afectados de asma está creciendo considerablemente en los últimos años en los países desarrollados, puesto que la exposición a distintos alergenos que desencadenen esta enfermedad es muy grande. Algunos estudios han tratado de relacionar el contacto con estas sustancias en la infancia y su posible papel en la génesis del asma posteriormente en la vida. Parece ser que los alergenos en personas predispuestas genéticamente (atópicos) pueden desencadenar asma. Entre estos agentes alergénicos se plantea que el contacto precoz durante la infancia con perros y gatos puede ser una de las múltiples causas que participen en la fisiopatología del asma. Un grupo de expertos ha publicado un estudio en la revista JAMA en el que demuestran que el contacto con dos o más perros o gatos...